Hemospermia: diagnóstico y tratamiento

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Para realizar un diagnóstico preciso y diseñar un tratamiento dirigido a los factores que causan la hemospermia es necesario que el paciente acuda al especialista. «En la evaluación en consulta debe registrarse la duración de los síntomas, los síntomas asociados (hematuria, clínica miccional, secreciones en el pene) y la asociación con la actividad sexual», explica el Dr. Manuel Alonso, especialista en la Unidad de Andrología de Urología Tratamiento.

«Buscaremos específicamente sobre trastornos conocidos de la próstata, antecedentes de exposición a tuberculosis o VIH, factores de riesgo para las ETS (relaciones sexuales sin protección, múltiples parejas sexuales), trastornos hemorrágicos conocidos y enfermedades conocidas que predispongan a las hemorragias (p. ej., cirrosis)», señala el Dr. Alonso

En cuanto a los fármacos utilizados, debe registrarse el uso de anticoagulantes o antiplaquetarios. Además, se deben evaluar y palpar los genitales externos para detectar signos de inflamación (eritema, masa, dolor a la palpación), especialmente a lo largo del epidídimo. El tacto rectal permite examinar en la próstata cualquier aumento de tamaño, sensibilidad incrementada o tumoración.

Estudios complementarios para el diagnóstico

En la mayoría de los casos, especialmente en hombres de menos de 35 o 40 años, la hemospermia es casi siempre benigna. Si no se encuentran anomalías importantes en el examen físico (incluyendo el tacto rectal), debe realizarse un análisis completo de orina, un urocultivo y un análisis para ETS, pero no son necesarios otros estudios.

Los pacientes que pueden tener un trastorno de base más grave y que deben ser estudiados con más detalle son los que presentan:

  • Una mayor duración de los síntomas (> 1 mes)
  • Hematuria (Sangre en la orina)
  • Síntomas de obstrucción urinaria
  • Hallazgos anormales en el examen físico
  • Fiebre, pérdida de peso o sudoración nocturna

Estos signos son especialmente preocupantes en varones de más de 40 años. Tal y como indica el Dr. Alonso, «las pruebas por realizar son análisis de orina completos, urocultivo, detección del antígeno prostático específico (PSA) y una ecografía transrectal». A veces se usan la RM y las citoscopias y rara vez estará indicado un análisis del semen, que puede ser útil cuando los antecedentes de viajes indican una posible exposición a S. haematobium.

Hemospermia: tratamiento

El tratamiento de la hemospermia se dirige a la causa, si ésta se conoce. «Para casi todos los pacientes, la única intervención necesaria consiste en darles la seguridad de que la hematospermia no es un signo de cáncer y no afecta su función sexual», afirma el Dr. Alonso. Si se sospecha una prostatitis, puede tratarse con antiinflamatorios y trimetoprim/sulfametoxazol u otro antibiótico durante 4 a 6 semanas.